«Habría una conexión evidente entre el Carnaval de Recife (pop auténtico, resignificado, renovado) y la Galeria Do Rock en Sao Paulo. El puente estaría en la apropiación creativa de la cultura audiovisual que se muestra en los trajes de la gente en Pernambuco y la moda hiper-moderna de cierto segmento de la juventud paulista que mezcla íconos, símbolos y signos del punk, el new wave, el thrash, la ciencia ficción, con sus respectivos héroes y monstruos, sin caer en el concepto de imperialismo cultural. Es una apropiación cultural activa que propone un remix identitario alojado en el “mundo de la vida”.
Sería interesante crear un puente entre estas manifestaciones y las ideas de Henry Jenkins (culturas participativas). Los nexos con los estudios de la globalización, la etnografía y la convergencia tecnológico/cultural son claros, toda vez que los nuevos medios sirven de vehículos y potenciadores de estos nuevos fenómenos contemporáneos.»