¿Cómo
fue que comenzaste en el diseño de afiches?
En la universidad, una de las cosas más importantes que me pasó
fue vincularme con la actividad cultural y política de los años
ochenta. Sin embargo, en la Facultad la visión de la política
tenía más de arte que de ideología y esa combinación
generó eventos y actos poéticos de una belleza que hacía
un notable contraste con la ferocidad con que la vida se vivía
en las calles. En fin, en ese contexto se realizaba un mítico café
concert cuya historia en el ámbito universitario lindaba con la
leyenda. Cada 15 días, en viernes, se juntaba la música,
la poesía, el teatro, la plástica y se celebraba el "acto
de crear". Para difundir esos eventos realizábamos unos afiches
que luego se fueron haciendo tradición. Esa experiencia, junto
con el conocimiento que iba teniendo de los ilustradores y afichistas
de cuyas obras leía en paralelo con la actividad curricular normal
(pasaba horas en la biblioteca hojeando revistas de diseño y arte)
creo es la matriz de donde se nutre mi posterior relación con el
género hasta hoy. |
¿Qué
status le asignas al afiche en relación a otras piezas gráficas?
El afiche tiene la característica de contar un cuento de una vez
y suscitar en el espectador distintas sensaciones y connotaciones a partir
del acto de vehicular una información. Siempre tendrá la
carga de ser el guiño que el paseante se encuentra en un muro y
que lo hace detenerse, a veces no porque el tema de que trate lo interpele,
sino porque lo atrajo su forma. Puede llegar a ser un objeto plástico
con valor en sí mismo y llegar a ser un fetiche, un objeto de culto,
lo cual habla por sí solo de su importancia como objeto.
¿Qué estilos es posible ver en tus
trabajos y por qué tendencias te sientes influenciado?
Es bastante evidente que he tratado de lograr una
cierta relación entre el desarrollo de la ilustración y
el afiche como pieza de diseño gráfico. También me
ha importado trabajar el tema de las tipografías como dibujo, es
decir, como imagen dentro de la composición, lo que pasa generalmente
por dotar al afiche de una cierta autonomía y lograr que se revele
como logotipo del tema al que alude la obra. |