Cuando se empezó a comprender la influencia que tenían en las personas los mass media, se produjo un control de la información. Este se ve en la selección de lo que se desea informar, su importancia y la visión de los hechos que se quiere entregar (Rodríguez, 2007: 267). Pero, ¿Cómo sería si todos los medios de comunicación estuvieran controlados por la misma autoridad? ¿Habría espacio para una libertad de opinión? Esta es la situación de Cuba.
Los medios de comunicación te entregan, de cierta forma, un poder sobre los receptores y la percepción que pueden tener de un hecho si la información se les ha entregado de una manera determinada. Según Maxwell McCombs “(…) los medios de comunicación aparecen como “constructores de una realidad”, de manera que organizan y estructuran conocimientos y significados para la audiencia” (Rodríguez,2007: 266). Entonces, la visión que se puede entregar a las receptores puede utilizarse con distintos fines tanto de propaganda como para el control ya que, a través de los mass media, pueden formarse opiniones y creencias que ayudan a configurar la sociedad en la cual estos están insertos al poder mostrar ideales y formas de vida.
El fin con el que se utilizan los medios de comunicación en Cuba es para mostrarles a las personas una visión determinada de la realidad en la que deben vivir, manteniendo el control de la población e incidir en su conducta. Harold Lasswell plantearía que se está utilizando una teoría que él nombró como “aguja hipodérmica” que consta básicamente en “inyectar” un mensaje o una idea en una masa, adaptando una forma determinante en la opinión (Rodríguez, 2007: 263). En Cuba, de esto se encarga la televisión, la prensa y el acceso a la Internet. Estos son los medios de comunicación más controlados por el gobierno, en el caso de la televisión sus programas están totalmente regidos por el discurso de las autoridades cubanas y controlado por estas mismas, lo emitido siempre tiene un límite de libertad al igual que en la prensa ya que no se permite el desarrollo de diarios independientes y en los que están bajo el control, no se les concede espacio para efectuar una crítica. Diferente es la situación del acceso a la Internet el cual está permitido para un bajo índice de la población, no obstante así se posee un exhaustivo control de lo que se publica, de la información a la cual se accede y quién lo hace, en otras palabras el gobierno, todo lo sabe. (Fuente: http://www.mgar.net/cuba/expresion.htm)
Lo único que nos deja pensar esta situación, es que existe una alta represión y cesura en Cuba, por parte del Estado hacia los medios de comunicación ya que entienden el punto fundamental, que ellos mismos usan a su favor, de que los mass media pueden influenciar en la percepción de la realidad que tienen los ciudadanos, entonces, si permiten una libertad de expresarse, saldrían a la luz todos los opositores a este régimen. Y si estos existen, ¿qué pasa en realidad con las personas que nos están de acuerdo con esta privación de la libertad de expresión y emiten su opinión?. Ese es el gran conflicto que crea el control porque la libertad de expresión se ve limitada a un discurso predeterminado, sin dejar forma ni medio por el cual las personas puedan expresar su descontento con la realidad. Las críticas a la forma de vida que tienen los ciudadanos en Cuba son sancionadas por la ley como fue el Caso Raúl Rivero, escritor y poeta, que fue condenado a 20 años de cárcel por “actos contra la independencia o la integridad territorial del Estado”.
El afán por este control total está vinculado claramente con el fin que tienen los medios de comunicación, que es emitir un mensaje y que un receptor lo asimile porque estos pueden incidir en la visión que se tiene de la realidad. En Cuba esta ambición ha causado desde detenciones hasta asesinatos por parte del Estado, donde lo más afectados han sido periodistas y escritores que realizan sus críticas ante la privación de la libertad de expresión que ejerce el gobierno.
¿Qué haríamos si en nuestro país nos privaran de la libertad para emitir nuestra opinión? Por lo menos yo, no podría escribiría este Post.
Que buen tema el del rol de los mass media como constructores sociales de realidad, sin embargo hay una incongruencia en tu Post, primero con McCombs, muy bien utilizado, señalas que los medios en Cuba están siendo utilizados para “construir realidad”, sin embargo falta señalar que están construyendo opinión al focalizar la atención.
Mas tarde señas que los medios son una aguja hipodérmica en Cuba, es decir inyectan mensajes a una audiencia pasiva ¿entonces por qué hay disidentes? Si llevan tantos años inyectando mensajes, por que existe este poeta que esta preso por ser un disidente del gobierno? McCombs se adapta mucho más a tu punto que Laswell, y como es posible apreciar en el desarrollo de los media, no se puede analizar los medios desde la perspectiva de la aguja hipodérmica que inyecta mensajes a una audiencia pasiva. Suficiente, pero otros autores servían más para este tema, extraño mas lectura.
Gracias opino lo mismo que el tema del rol de los mass media es muy interesante y aun más al ver como se muestra en Cuba. Concuerdo con tu punto de vista sobre la existencia de disidentes ya que cuando escribí sobre este tema también me surgió esa duda y según como abarqué el tema con la aguja hipodérmica encontré algo similar a una respuesta a la interrogante en un texto de Wolf en el capitulo “Confrontando versiones”. Lo que da a entender el autor es que nunca existió una prueba empírica de esta teoría de la aguja hipodérmica, que no hay resultados que avalen la efectividad de este modelo, así se puede comprender la existencia de opositores dentro de este país que trata de construir una realidad para sus ciudadanos. Espero haya respondido tu pregunta.
Exacto, por esta razón la teoría de la comunicación fue evolucionando y, no tan rápidamente, se dejo atrás una teoría conductista y psicológica que en el contexto sociopolítico de la época pareció a priori “Perfecta”. Bien Constanza.
Saludos.